Son los primeros días del despliegue del personal militar en la frontera, en donde al menos en la región de Antofagasta, aún no se registran detenidos por las fuerzas Armadas.
Foto: Cedida
Fue durante este sábado que el continente militar llegó a las zonas fronterizas de la Región de Antofagasta para actuar como medio disuasivo contra la migración irregular y delitos como el tráfico de drogas, autos y persona. Despliegue que está contemplado en las nuevas capacidades que otorgó a la reforma constitucional a las Fuerzas Armadas, quienes tendrán nuevas facultades como controles preventivos de identidad en las fronteras, registros de vestimenta, equipaje y vehículos, y la detención de personas sin la necesidad del acompañamiento de Carabineros, es decir, de manera autónoma.
En rigor, esta modificación a la Constitución Política de Chile se realizó con el objetivo de permitir la protección de infraestructura crítica por parte de las Fuerzas Armadas, reforzar el despliegue de los medios militares e incrementar las tareas de control fronterizo.
En este sentido, las autoridades catalogaron como un impacto importante para la seguridad fronteriza del territorio, el que se extenderá por 220 kilómetros y funcionará en forma de polígono para proteger la frontera, es decir, que actuará en forma de triángulo entre Calama, Ollagüe e Hito Cajón, para abarcar completamente esta extensión.
Si bien, esta operación por el momento no contempla los complejos Siro y Jama, la Delegada Presidencial Regional, Karen Behrens, indicó que se trata de un operativo que se extenderá por 90 días y que está sujeto a cambios, en caso de que así lo amerite.
Dado que a las Fuerzas Armadas se le otorgaron facultades para realizar controles preventivos o detención de personas, el personal del ejercito debió realizar capacitaciones para ejercer estas acciones de manera autónoma y sin la necesidad de Carabineros, quienes eran los únicos facultados para realizar estas labores.
Las acciones de fiscalización de parte del ejército chileno en la frontera se llevarán a cabo las 24 horas del día y los siete días de la semana, por lo que se dispuso de la mayor cantidad de tropas y capacidades del ejército.
Así lo manifestaron el general Jaime Izarnótegui, Comandante en Jefe 1ra División Ejército y el general Gonzalo Castro, Jefe de la II Zona de Carabineros.
Por otra parte, desde la Policía de Investigaciones indicaron que el personal que se encuentra en zonas cordilleranas continuará ejerciendo trabajos tanto administrativos como territoriales, realizando reconducciones o dando cuenta al Servicio Nacional de Migraciones.
En cuanto a las zonas que presentan mayor ingreso de migrantes de manera irregular, el prefecto inspector Hernán Solís, jefe de la Región Policial de Antofagasta, indicó que es la localidad de Ollagüe quien lidera la estadística, pero que, a pesar de este factor, la región no cuenta con un flujo superior de ingresos a los años anteriores.
Son los primeros días del despliegue del personal militar en la frontera, en donde al menos en la región de Antofagasta, aún no se registran detenidos por las fuerzas Armadas.
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