TOP acreditó que los condenados se concertaron previamente para la comisión del ilícito, se premunieron de los elementos necesarios, siguieron sus víctimas durante varias cuadras y, cuando estaban comiendo, procedieron a asaltarlas, mientras el tercero los esperaba a pocos metros del lugar con el auto dispuesto para emprender la huida.
Foto: Cedida
El Tribunal Oral en lo Penal de Calama condenó este jueves a Cesar Yegre Torrealba, Edgardo Alfonso Lavado Solano y Antonio Jose Ocanto Carmona, todos de nacionalidad venezolana, a la pena de cadena perpetua simple, es decir, 20 años de cárcel efectiva, tras acreditarse su participación en el homicidio de un repartidor de la empresa Lipigas en el sector poniente de la capital loína, en febrero del año 2023.
El fiscal jefe de Calama, Eduardo Peña Martínez, destacó el trabajo investigativo desarrollado por la Brigada de Investigación de la PDI Calama, el que permitió identificar a los involucrados, detenerlos y ponerlos a disposición de la justicia, para posteriormente reconstruir los hechos, establecer la participación de cada uno de los imputados y lograr para todos ellos condena a cadena perpetua simple.
“Acá hablamos de tres imputados que, de manera concertada y planificada, asaltaron a un trabajador de 45 años que estaba junto a su esposa, y le dieron muerte en una acción tremendamente violenta. Al respecto, quiero destacar el trabajo investigativo desplegado por la Fiscalía de Calama y la PDI, que permitió acreditar ante el tribunal la participación de cada uno de ellos en este grave hecho”, señaló el persecutor.
La Delegación Provincial de El Loa, parte querellante en esta causa, valoró la condena, “como querellantes, queremos destacar la labor coordinada que desempeñó la Policía de Investigaciones y la Fiscalía en este caso. Este trabajo permitió detener a los involucrados, procesarlos y condenarlos a cadena perpetua simple.”, señaló el delegado Miguel Ballesteros.
La autoridad provincial agregó que «como Gobierno lo hemos dicho y lo vamos a seguir repitiendo: no habrá impunidad para los delitos violentos y bajo esa premisa estamos trabajando con el plan Calles sin Violencia, que nos permitió inyectar recursos en la Fiscalía y disponer de equipos en las policías dedicados exclusivamente a trabajar para esclarecer estos casos”.
LOS HECHOS.
El Tribunal dió por acreditado que el día el 14 de enero de 2023, la víctima, de 45 años, trabajador de la empresa Lipigas, en compañía de su esposa, estacionaron el camión 3/4 de reparto en calle Antofagasta, entre Pucón y Arauco, de la capital loína, para consumir una colación, cuando fueron abordados por Antonio Ocanto y Edgardo Lavado, quienes con la intención de intimidar a la pareja con un arma de fuego para robar el dinero y otros artículos de valor, tomaron posición uno en cada costado del vehículo.
Al percatarse el conductor del camión de la intención de los condenados, éste comenzó a forcejear desde el interior del vehículo con Ocanto y desde el otro costado Lavado efectuó un disparo directo al cuerpo del trabajador, quien herido descendió del móvil para repeler el asalto, recibiendo diversos golpes y la sustracción de dos teléfonos celulares, dinero en efectivo y otras especies, para luego huir hacia calle Arauco, donde los esperaba el acusado Julio César Yegre Torrealba en un automóvil, en el que huyeron del lugar, donde a los pocos minutos falleció la víctima a raíz de un shock hipovolémico provocado por un impacto de bala en la zona abdominal.
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